Muchas veces las madres se interrogan acerca de su rol, de su desempeño y no saben qué parámetros seguir ni por dónde continuar la misión maternal.

Por suerte para todas, la Academia Nacional de Matrología y Cría, conciente de su responsabilidad frente al Patrimonio Reproductor de la Humanidad, ha categorizado a las madres dentro de una tipología que permite identificarlas, cuidarlas y si es necesario, perseguirlas como se merecen.

Tipologia materna

Mater Eroicae

Juana de Arco es un buen ejemplo de madre heroica: mujer soltera que queda embarazada del espíritu del rey de Francia y decide tener al pequeño infante de Lorena, su hijo, sola, sola, sola. La Santa Inquisición la agarra, la interroga, la mete en la hoguera por transgresora, después la santifican y se convierte en Santa Juana a la leña. Es el prototipo de la mujer que se asa por sus hijos. Para ella la maternidad es una epopeya, un campo de batalla, una bandera y finalmente una quemadura de aquellas.

Mater Atleta Olimpica De La Teta En Garrocha

Se entrena todos los días, de día y de noche. Para ella, la maternidad es una olimpíada personal y privada: salta en garrocha con todas las tetas sueltas. ¡Bum!, se cae, aplasta las tetas. Se levanta, saluda y se va.

Mater Totus Meus

Está convencida de que todos son sus hijos. Por eso repite: ¡Totus Meus! ¡Totus Meus! Y los padres del mundo responden desde la otra orilla: ¡Totus tuus! ¡Totus tuus!. Tiene los dedos como ventosas y agarra maternalmente a todos como si fueran sus hijos, a las novias o novios de sus hijos, yernos, nueras, su propio marido, sus padres, sus suegros, sus hermanos, cuñados, amigos, vecinos y todo rango de parientes que se hagan presentes. No discrimina: incluye a los ex maridos, clientes, pacientes e impacientes y siguen las firmas.

Mater Femina Carenciata Est

Esta madre busca llena de esperanza una recompensa emocional en efectivo, por la inversión a largo plazo que ha hecho en sus hijos y por las deudas afectivas que le dejaron sus propios padres. Participa de los grupos de estudio "Psicopatología del Buraco".

Mater Filicida

Es la madre a quien los vecinos de todo el barrio escuchan cuando grita : ¡Los mataría! ¡Los mataría! ¡Me sacan canas verdes!. Además de filicida, es conventillera.

Mater ODNI: Objeto Doméstico No Identificado

Es una mujer que se cree un artefacto hogareño y pasea por la casa como un fantasma doméstico. Es como el televisor: todos la miran sin hacer nada. Es como la cocina: todos esperan que le salga la comida. O creen que es como la heladera, que siempre tiene leche fresca. O piensan que es como el lavarropas, que da ropa limpia. Ella es sencilla y trabajadora como una escoba o un plumero. Está siempre lista para que le cuelguen cosas, como el perchero. Tiene fuertes aspiraciones para sus hijos, como la aspiradora. Algunas dicen que se sienten como un trapo de piso. Otras viven como un felpudo y, a veces, hasta creen que son un inodoro. Como viven a las corridas, se olvidan el sexo en todas partes.

Mater Nutritivae

Esta mujer no escatima alimento: es de carne y hueso, reparte bifes, tiene buen lomo, porta huevos, no es verdurita, le sobra polenta, da frutos, ofrece leche, dona sangre, tiene sudor pero no se va en lágrimas. En Turquía, en sus cumpleaños, se las celebra con vibrantes eructos de satisfacción, que son recibidos como bendiciones.

Mater Sacrificatta

Es la mujer que renuncia a sus deseos personales para ser Ministra Plenipotenciaria del Ministerio Maternidad y Hacienda. Deja de estudiar, de trabajar, de salir, de crecer y se queda enana tartamuda, pelada y bizca. Estas madres organizan sacrificios a medida, diseñan inmolaciones y asesoran pérdidas. Van a domicilio y después pasan facturas elevadas.

Regina Mater

Cree representar el supremo poder celestial en la tierra. Tiene su equipo de trono, tarima y manto sagrado. Además de una corona de piedras preciosas y otra de espinas para meter culpa. Tratan a sus hijos como príncipes y princesas, les exigen a los vecinos honores y pleitesía. Su casa es su palacio y se dan corte todo el tiempo. Pasea en carroza o sulky.

Mater Ego Sum

Son tan egoísta que no da ni la hora a los hijos. No son gamba, ni les dan pie para nada. Tampoco les dan una mano, ni les ponen el hombro. No permite que le toquen ni un pelo. Los caldeos dicen que son mujeres que tienen el alma empedrada. Y los asirios dicen que tienen el alma asfaltada.

Mater Auxiliadora

Siempre listas para socorrer. Tienen un destornillador colgado del cuello. Vienen provistas de grúas de remolque, gato, inflador, ambulancia, chinchorro de repuesto, botiquín y rueda de auxilio. Son insomnes, aman las urgencias y usan casco de bombero.

Mater Mata Hari

Espía. Husmea. Entra sin pedir permiso. Revisa los cajones. Lee los diarios personales. Escucha las conversaciones. Usa la ropa de las hijas. Seduce y se hace amiga de los amigos de sus hijos. Ella dice que es participativa.

The Disney Mader

Ellas quieren vivir en DisneyWorld, porque ahí el tiempo está detenido y entonces no envejecen. Apenas llegan se visten al estilo de Cenicienta, la Bella Durmiente o Minnie. Alquilan la casita de Blancanieves por toda la temporada. Y dicen que son muy felices.

Cuando juegan a La Bella Durmiente, la disneymader se va al bosque con las ardillitas y viene el príncipe Valium a dormir con ellas.

Cuando se hace la Cenicienta vive con el balde colgado y la escoba a cuestas. No hay detergente que le alcance.

Las Blancanieves le absorben el seso a sus hijos con una pajita y por eso se quedan enanitos.

Las que esperan al lobo feroz de su vida, se hacen las Caperucitas.

Y las que son ya abuelitas también lo esperan, listas en su camita.

Sacra Mater Judea

Las madres judías son auténticas antigüedades en el campo de la maternidad. Tienen más de 5700 años. Son mujeres con mucho desierto caminado, mucha tierra prometida, mucho maná del cielo, mucha tabla de la ley, mucha diáspora y la más grande y valiosa colección de prepucios del mundo. Son las madres elegidas por Dios, no sabemos para qué.

La Mater Judea es sagrada como la Torah, los rollos del Mar Muerto o El Muro de los Lamentos. Es una reliquia que pasa de generación en generación, de familia en familia, de mano en mano. O sea, no se pierde, no se transforma y no desaparece. Es un objeto de colección.